Aunque el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) informó que en abril (mes en el que se dieron con mayor rigor las medidas para contener la pandemia del coronavirus) la tasa de desempleo fue de 4.7 por ciento, el Banco de México (Banxico) señaló que si se contempla a aquellos considerados como “disponibles” para trabajar como parte de la población económicamente activa, la tasa de desempleo “encubierto” sería de 25.4 por ciento de la fuerza laboral.
De acuerdo con la minuta de la reunión de política monetaria con motivo de la decisión del pasado 25 de junio, al incluir también a los trabajadores subempleados, se llegaría a un valor de 50.6 por ciento para el indicador conocido como brecha laboral.
En la reunión, la mayoría de los integrantes de la Junta de Gobierno destacó la información del Inegi relacionada con la pérdida de empleos de 12.5 millones en abril, uno puntualizó que de estos, más de 10 millones corresponden al sector informal y que la mayor parte de los empleos perdidos eran de ingresos de dos salarios mínimos o menos, lo que evidencia que la población más vulnerable se ha visto particularmente afectada.
Además, uno de los miembros de la junta subrayó que el número de trabajadores ya sea desocupados, disponibles para trabajar o subempleados, aumentó en más de 20 millones entre marzo y abril.
Otro integrante argumentó que al considerar el número de establecimientos que han cerrado permanentemente, a partir de los que se han dado de baja del IMSS, puede concluirse que buena parte del desempleo actual es permanente, ya que no se trata de puestos de trabajo que podrán recobrarse durante la recuperación de la economía.
GGA