El sector bancario español sufrió un golpe inesperado el miércoles, después de que el Tribunal Europeo de Justicia ordenó a los bancos devolver a sus clientes todo el dinero que ganaron por las cláusulas “injustas” de suelo en las hipotecas.
El dictamen expone a bancos como BBVA, Banco Sabadell, Caixabank, Banco Popular y Liberbank a reclamaciones que pueden llegar a ser de miles de millones de euros.
En respuesta, las acciones de Popular cayeron 7 por ciento en las operaciones de la mañana, y las de Sabadell y Caixabank cayeron 3 por ciento. Liberbank, un banco español más pequeño, cayó más de 13 por ciento.
De acuerdo con las estimaciones de los analistas, el dictamen obligará a las entidades más grandes del país que cotizan en bolsa de valores a tener reservas adicionales de 3 mil millones de euros.
En todo el sector, incluidos los bancos más pequeños y los que no cotizan, el impacto puede llegar a ser hasta de 4 mil 470 millones de euros, de acuerdo con un estudio de Afi, una consultora con sede en Madrid.
David Ruiz, analista bancario de Afi, dijo sobre el tema: “El impacto es sustancial pero es muy desequilibrado. En algunos casos el dictamen no va a afectar a algunos bancos y en otros sí, lo que puede llevar a una reducción de dividendos y afectar la solvencia. Pero llega en un momento complicado para el sector, con márgenes ya demasiado pequeños y tasas de interés muy bajas”.
Las cláusulas de suelo, en efecto, imponen tasas de interés mínimas en las hipotecas con tasas de interés variable al establecer un límite sobre lo mínimo que pueden caer las tasas hipotecarias en tándem con la tasa de referencia.
En la práctica, esto significa que los españoles que adquieren hipotecas no se benefician totalmente con el entorno de tasas de interés que se encuentra en mínimos históricos en los últimos años.
El alto tribunal español consideró ilegal las cláusulas en 2013. Al mismo tiempo, el tribunal decidió que los bancos no tendrían que compensar el exceso de dinero que recibieron como resultado de las cláusulas de suelo antes del dictamen. Esa parte de la decisión la impugnaron los deudores, y el Tribunal Europeo con sede en Luxemburgo se puso de su lado el miércoles.
“La situación de injusticia debe tener el efecto de regresar al consumidor a una situación en la que se encontraría si ese término no hubiera existido”, dijo el tribunal en un comunicado.
“Por lo tanto, el constatar que las “cláusulas de suelo” son injustas debe permitir la restitución de las ventajas que obtuvieron injustamente los vendedores o proveedores en detrimento del consumidor”.
El dictamen del miércoles significa que los bancos ahora tendrán que realizar importantes reservas adicionales, lo que afectará las ganancias en un momento en el que el sector ya lucha por mantener la rentabilidad.