El índice nacional de competitividad, que mide el conjunto de condiciones necesarias para generar un mayor crecimiento económico, promoviendo la inversión y la generación de empleo, aumentó 2.81 por ciento durante el año pasado, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y la Secretaría de Economía.
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De 2010 a 2016, el indicador muestra una tendencia positiva y acumula un crecimiento de 8.67 por ciento, pasando de 97.27 a 105.71 puntos. Durante este periodo, la tasa promedio de crecimiento es de 1.40 por ciento.
A su interior, los componentes con los avances más significativos fueron: medioambiente e inclusión social, con un alza de 13.54 por ciento; infraestructura, con un incremento de 3.04 por ciento; y la eficiencia de los negocios, con un aumento de 1.88 por ciento.
Asimismo, subió 1.82 por ciento el desempeño macroeconómico; y 0.18 por ciento el componente de instituciones; mientras que retrocedieron 0.27 y 0.13 por ciento los conceptos de capacidades e innovación, respectivamente.
El componente de instituciones es el único con una tasa de crecimiento promedio negativa en el periodo comprendido entre 2010 y 2016.
GGA
