La apertura del sector energético a la participación de empresas privadas en México —avalada en 2013 con la reforma energética— avanza en la segunda etapa de la Ronda Uno, el proceso de concurso para que las compañías puedan extraer hidrocarburos.
La Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) —órgano encargado de supervisar las licitaciones— estableció que para esta segunda etapa, se adjudicarán cinco contratos que corresponderán a nueve campos petroleros ubicados en el Golfo de México, frente a las costas de Tabasco y Campeche.
Se tratará de contratos de producción compartida, conocidos como CPC, los cuales permiten que las empresas privadas puedan poseer parte de los recursos energéticos extraídos en el campo asignado, después de entregarle al gobierno una cantidad de hidrocarburos que le requiera de acuerdo con el contrato.
La extracción de hidrocarburos para esta etapa se realizará en aguas someras (poco profundas) de los siguientes campos petroleros:
-Amoca, Miztón y Tecoalli, que abarca un área de 68 kilómetros cuadrados (área contractual 1).
-Hokchi, en una extensión de 42 kilómetros cuadrados (área contractual 2).
-Xulum, de 58.8 kilómetros cuadrados (área contractual 3).
-Ichalki y Pokoch, de 58 kilómetros cuadrados (área contractual 4).
-Misón y Nak, de 54. 1 kilómetros cuadrados (área contractual 5).
De acuerdo con la CNH, un total de 11 empresas participarán en la segunda licitación de la Ronda Uno agrupadas en 5 consorcios: ENI International con CASA Exploration, Pan American Energy con E&P Hidrocarburos y Servicios, Fieldwood Energy con Petrobal, Petronas Carigali International con Galp Energía, y Talos Energy con Sierra Oil & Gas y Carso Oil and Gas.
Además, nueve compañías irán a concurso de manera individual: CNOOC International, Compañía Española de Petróleos, Dea Deutsche Erdoel, Lukoil, ONGC Videsh Limited, Plains Acquisition, Statoil E&P y Shell.
Mientras en la primera licitación de la Ronda Uno, realizada el 15 de julio, sólo se logró la asignación de dos áreas contractuales, de un total de catorce disponibles, para la segunda etapa la Secretaría de Energía y la Comisión Nacional de Hidrocarburos buscan mejores resultados, y para ello flexibilizaron los requisitos para la adjudicación de campos.
Para Alexander Braune, socio líder de Energía y Recursos Naturales de KPMG, esta segunda fase tiene “un atractivo paquete a licitar, (debido a que) contiene contratos para la inmediata explotación de hidrocarburos, pues llevan la certeza de reservas probadas y probables certificadas”, según un comunicado de la firma.