La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) tuvo un arranque de septiembre negativo, en línea con la tendencia global, al cerrar con una pérdida de 1.85 por ciento, derivado del nerviosismo por la desaceleración económica de China y datos débiles de Estados Unidos.
El Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) se ubicó en 42 mil 911.51 unidades, con una pérdida de 810.45 enteros respecto al nivel previo, en una sesión donde gran parte de las emisoras que participan en el mercado operaron con números rojos.
Al cierre de la jornada accionaria, en la Bolsa Mexicana se operó un volumen de 326.5 millones de títulos por un importe económico de 10 mil 191.8 millones de pesos, con 28 emisoras que cerraron al alza, 80 perdieron y seis se mantuvieron sin cambio.
Sin embargo, el mercado accionario local tuvo un mejor desempeño que sus pares estadounidenses, donde las bajas fueron más pronunciadas, con el Dow Jones que cayó 2.84 por ciento, el Nasdaq perdió 2.94 por ciento y el Standard and Poor´s 500 bajó 2.96 por ciento.