El único producto de Coca Cola que puede verse beneficiado por la reducción al Impuesto Especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) es Coca-Coca Life, que apenas representa el .5 por ciento de sus ventas totales, según dio a conocer el director de finanzas de Coca-Cola Femsa, Héctor Treviño.
Durante su participación en una conferencia con analistas tras dar a conocer los resultados financieros de la empresa al tercer trimestre del año, el directivo explicó que la modificación que se discute en el Senado tendría un mínimo beneficio para ellos.
Ya que, apuntó, los productos beneficiados por esta reducción al IEPS son aquellos que tienen hasta 5 gramos de azúcares añadidos por cada 100 mililitros. En esta categoría, el único producto que la marca tiene es Coca-Cola Life, saborizado con Splenda.
"La reducción de este impuesto que está siendo discutido en el Senado, incluye a las bebidas que tienen menos de 5 gramos de azúcar por cada 100 mililitros. Actualmente, la única presentación que tenemos que entrará en este beneficio (si es que se aprueba) es Coca-Cola Life, que contiene una mezcla de azúcar y Esplenda.
"Así que ahora, aunque si significa una reducción para nosotros, es algo realmente neutro. Esto dividirá a la industria, ya que hay muchos que por sus formulas pueden obtener menor costo por el impuesto", explicó Treviño.
Esto en medio de una discusión sobre la reducción al IEPS que mantienen los legisladores mexicanos, en donde se ha acusado a las refresqueras de intervenir ante representantes del Congreso y el Senado para pedir la reducción o desaparición del impuesto.
Treviño advirtió que la empresa Coca-Cola Femsa no se verá altamente beneficiada, ya que el segmento de refrescos bajos en azúcares agregados no es el fuerte de la compañía.
Según cifras entregadas por el director de finanzas de la refresquera, mientras su producto que entra en esta categoría, Coca-Cola Life, representa el .5 por ciento de sus ventas, sus otros productos bajos en calorías como Coca-Cola Light y Coca-Cola Zero apenas y representan el 3 por ciento.
Es decir, la empresa sólo se vería beneficiada en caso de que se diera marcha atrás al impuesto en el tipo de productos que representan sus mayores ventas, las cuales no son aquellas bajas en azúcares.