Lilian Tintori, esposa del líder venezolano Lepoldo López, leyó una carta enviada por el político desde su reclusión, en la que escribió: "No me arrepiento de la decisión que tomé (...), las grandes causas ameritan grandes sacrificios".
La esposa del dirigente venezolano llegó al lugar desde la cárcel militar de Ramo Verde, en las afueras de la capital venezolana, a donde volvió esta madrugada su esposo, tras ser condenado a prisión por los delitos de instigación pública y asociación para delinquir.
"El que se cansa pierde y yo nunca me voy a cansar de luchar por Venezuela, ordenaron meterme preso con la mala intención y lo supe desde hace un año, pero no dudé en dar un paso al frente para enfrentar la dictadura", leyó Tintori.
El político de 44 años, graduado en economía y con una maestría en Harvard, invitó a sus simpatizantes, a través de la carta, a prepararse para las elecciones legislativas convocadas para el 6 de diciembre, en las que por primera vez en 16 años la oposición podría arrebatar la mayoría legislativa al oficialismo, según las encuestas.
El dirigente, que forjó su carrera como adversario del presidente Hugo Chávez (1999-2013), fue uno de los promotores de la estrategia conocida como "La salida", que consistía en presionar la renuncia de Maduro a través de protestas callejeras y se entregó a las autoridades el 18 de febrero del año pasado.
En su mensaje, López insistió en que está "convencido de la bondad" de su causa, "que no es otra que la liberación de todo un pueblo que hoy sufre las dolorosas consecuencias de un modelo que fracasó en lo económico, en lo político y en lo social".
Lilian Tintori, rodeada de decenas de simpatizantes que gritaban "¡Sí se puede!", convocó a una concentración el próximo 19 de septiembre después de leer la carta enviada por su esposo.
"Los convoco desde hoy (...) a que salgamos el próximo sábado 19 de septiembre a construir nuestra victoria, a tomar las calles en paz y en democracia, bajo estricta disciplina no violenta", dijo a través de un megáfono en plaza de Caracas.