El "extremadamente peligroso" huracán Joaquín seguía hoy ganando intensidad tras descargar su fuerza sobre las islas Bahamas, mientras la costa este de Estados Unidos se preparaba para recibir su impacto, y a partir de este viernes se espera que experimente un giro hacia el norte del Atlántico.
Joaquín, "un huracán extremadamente peligroso de categoría 4" en la escala Saffir-Simpson de máximo 5, generó destructivos vientos sostenidos de 215 km por hora, indicó el Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés), con sede en Miami que advirtió que podría seguir incrementando su fuerza.
El centro del huracán se encontraba situado a las 23 hora local a unos 125 kilómetros al sur de la isla de San Salvador, y se desplaza a 6 kilómetros por hora en dirección oeste.
La zona central de las Bahamas, archipiélago del Atlántico cercano al estado norteamericano de Florida, sufrió durante la jornada los potentes vientos y las copiosas lluvias de Joaquín, y el castigo continuará hasta el viernes, indicó el NHC.
El ciclón, se ubicaba a 35 km de Clearence Town, en Long Island, Bahamas hacia las 01:00 hora GMT. Según las previsiones el viernes pasará sobre la zona norte del archipiélago y luego empezaría a desplazarse en paralelo a la costa este estadunidense, aunque sigue siendo un interrogante si llegará a tocar tierra.
Los últimos modelos muestran una trayectoria de Joaquín por el Atlántico más alejada de la costa este estadunidense, pero el NHC advirtió que "aún no se puede descartar un impacto directo" y llamó a mantener la guardia en alto.
Aunque en definitiva no la golpee de lleno, la costa este estadunidense experimentará al menos lluvias y fuerte oleaje, por lo que los preparativos de emergencia comenzaron a activarse desde Carolina del Norte hasta Nueva York.
El centro meteorológico, con sede en Miami, espera que el huracán gire hacia el norte este viernes, y el sábado se debería producir un movimiento "más rápido hacia el norte o norte-noreste", ya rumbo hacia el Atlántico norte sin peligro para tierra.
Según la trayectoria prevista para esta noche, el núcleo de los vientos más fuertes de Joaquín se moverá "cerca o sobre partes de las Bahamas centrales esta noche y cerca o sobre partes de las Bahamas noroccidentales el viernes".
Hasta el momento el paso del huracán por el sur de Bahamas ha dejado un centenar de refugiados en varias islas y daños en viviendas y estructuras, sin que se haya reportado la pérdida de vidas humanas.
A la espera de lo que ocurra mañana con el huracán, centenares de personas permanecen aisladas en sus viviendas, aunque no hay datos de graves daños materiales. Los efectos de Joaquín se dejarán sentir también durante todo el día de mañana, en especial en el área norte de Bahamas.
Las autoridades también han emitido una advertencia de tormenta tropical para las provincias cubanas de Las Tunas, Camaguey, Holguín y Guantánamo, lo que significa el paso del sistema en 36 horas.
En Estados Unidos la Guardia Costera también alertó hoy a los bañistas y navegantes en los estados de Florida, Georgia y Carolina del Sur de los riesgos en las actividades marítimas debido a las fuertes corrientes.
El presidente Barack Obama se mantiene al tanto de los preparativos, indicó la Casa Blanca. Joaquín, que ya es el huracán más potente de la actual temporada, que termina en noviembre, provocó intensas lluvias sobre las islas centrales e inundaciones costeras y marejadas.
Inundaciones de magnitud se han registrado en algunas islas, sobre todo en Acklins, señaló el capitán Stephen Russell de la agencia de emergencias de Bahamas, citado por el diario Tribune 242.
"Hay inundaciones severas en Acklins y nos informaron de dos personas atrapadas en sus casas", dijo Russell, al señalar que los equipos de rescate deben esperar a que amainen los destructivos vientos para poder atender las emergencias. Cuba, Haití y República Dominicana también recibirán lluvias producidas por Joaquín.
Las autoridades de los estados de la costa este de Estados Unidos llamaron a sus habitantes a prepararse. En Carolina del Norte, se decretó desde el jueves la evacuación obligatoria de la turística isla Ocracoke, que por su ubicación en el extremo este sería la más expuesta ante un huracán.
Un poco más al norte, la mayor base naval de Estados Unidos, Norfolk Naval Station (al sur de Washington), fue puesta en alerta. Virginia, Maryland y Nueva Jersey declararon estado de emergencia en prevención de la llegada de Joaquín.
"Necesitamos que se preparen y no entren en pánico", señaló el gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, en su cuenta de Twitter. "Es mejor prepararse para lo peor", escribió con exceso de precaución el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, con el recuerdo vivo del huracán Sandy, que en 2012 arrasó la costa noreste de Estados Unidos, donde dejó alrededor de 200 muertos.
Joaquín es la décima tormenta de la temporada de huracanes del Atlántico. Hasta ahora dos tormentas han alcanzado la categoría de huracán, pero el meteoro más destructivo fue la tormenta tropical Erika, que dejó en agosto una treintena de muertos y cuantiosos daños materiales en la pequeña isla caribeña de Dominica.
La Agencia Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) había pronosticado que la actual temporada sería menos activa de lo habitual, con un máximo de cuatro huracanes, sobre todo por el fenómeno de El Niño, que inhibe la formación de tormentas.
En la actual temporada de huracanes se han formado ya diez tormentas tropicales: Ana, Bill, Claudette, Danny -esta transformada en el primer huracán de categoría mayor (3) de la temporada-, Erika, Fred -un huracán de categoría 1-, Grace, Henry, Ida y Joaquín, ahora huracán de categoría 4.