Todas las personas que lleguen a Hong Kong procedentes de China serán sometidas a una cuarentena obligatoria de dos semanas a partir del sábado para evitar la propagación del coronavirus.
"La medida es dura. Pero después de este anuncio (...) creo que el número de llegadas va a disminuir", dijo Carrie Lam, jefa del ejecutivo local.
"¿Quién querrá entrar a Hong Kong desde el continente y ser puesto en cuarentena por 14 días? En visto de ello, no deberíamos tener que gestionar una gran número de llegadas", agregó.
Hong Kong, territorio semiautónomo chino, tiene 21 casos confirmados y anunció ayer su primera muerte por coronavirus. Hasta ahora ha cerrado algunos de sus puestos fronterizos con China continental.
Lam dijo que cerrar totalmente la frontera sería poco práctico, económicamente perjudicial y discriminatorio, por lo que puso en marcha esta nueva medida preventiva.
Según datos oficiales, cerca de diez mil habitantes de China continental usan los puestos fronterizos y el aeropuerto internacional para entrar a Hong Kong.
Por su parte, unos 33 mil residentes en Hong Kong pasan la frontera terrestre para entrar a China continental.
LP
