Las carreteras de la costa este de Estados Unidos estaban congestionadas, con largas filas de autos que buscan alejarse de Florence, un huracán de categoría cuatro "extremadamente peligroso" que llevó a las autoridades a ordenar la evacuación de cientos de miles de personas.
Las operaciones de evacuación afectan a 1.7 millones de personas en Carolina del Sur, Carolina del Norte y en Virginia, los estados más amenazados por la tormenta que se desplaza a 28 kilómetros por hora y que debería alcanzar las costas estadunidenses en la noche de este jueves, según las previsiones del Centro Nacional de Huracanes (NHC).
"No hemos tenido una tormenta de esta magnitud desde la década de 1950", dijo Jim Wenning un habitante de Wrightsville Beach, en Carolina del Norte, que taladro en mano protegía las ventanas de un edificio.
El meteoro se ubicaba 925 kilómetros al sureste de Cape Fear, en Carolina del Norte, y el NHC dijo que se espera que toque tierra en las Carolinas a última hora del jueves o en la madrugada del viernes.
Here is the latest satellite image of Florence. Most likely arrival time of tropical storm force winds in our area is late morning/early afternoon tomorrow. Today is the last day to safely travel out of the area. Please heed any evacuation orders and we will continue to monitor. pic.twitter.com/tKs4dmYWEE
— NWS Wilmington NC (@NWSWilmingtonNC) September 12, 2018
La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) dijo que había mucho tráfico en algunas de las rutas de evacuación y el ejército anunció que se preparaba para asistir a las autoridades.
"Ya estamos experimentando tráfico muy intenso en algunas rutas de evacuación", dijo Jeff Byard, de la FEMA.
El gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper, urgió "salir ahora" a los habitantes de las zonas a evacuar.
"Esta es una tormenta de la cual la gente tiene que escapar", dijo Cooper. "Ésta es una tormenta histórica, algo que pasa quizás una vez en la vida", precisó.
Desde la Casa Blanca, el presidente Donald Trump instó a obedecer las órdenes de evacuación, insistiendo en que "si se les pide que se vayan, salgan".
"Ésta será una tormenta mucho mayor de lo que hemos visto en décadas", dijo Trump, destacando la preparación del gobierno. "No ahorramos ningún gasto", dijo.
Hurricane Florence is looking even bigger than anticipated. It will be arriving soon. FEMA, First Responders and Law Enforcement are supplied and ready. Be safe!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) September 12, 2018
Durante la conferencia Trump felicitó a su gobierno por su "increíble" y "exitosa" respuesta a la emergencia generada por el huracán María en setiembre del año pasado, que dejó cerca de tres mil fallecidos en Puerto Rico.
We got A Pluses for our recent hurricane work in Texas and Florida (and did an unappreciated great job in Puerto Rico, even though an inaccessible island with very poor electricity and a totally incompetent Mayor of San Juan). We are ready for the big one that is coming!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) September 12, 2018
El gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, cuestionó a Trump por esas declaraciones, reclamó ayuda federal y dijo que los habitantes de la isla carecen de "ciertos derechos inalienables de los que gozan" en Estados Unidos.
Durante los días y semanas que siguieron al huracán del 20 de septiembre de 2017 llovieron críticas a Trump por su inacción frente al desastre generalizado en que estaba sumida la isla, que pasó semanas sin telecomunicaciones y meses sin electricidad en grandes porciones de su territorio.