El barco ruso Akádemik Shokálskiy, que quedó atrapado durante dos semanas en los hielos antárticos con 74 personas a bordo, llegó hoy al puerto de Bluff, en el extremo meridional de Nueva Zelanda, informaron medios locales.
Tras su llegada, las autoridades neozelandesas realizaron una inspección de rutina vinculada con la bioseguridad para asegurarse de que no está contaminado, según la emisora NewstalkZB.
El barco ruso se había quedado varado en la víspera de Navidad con 52 pasajeros, entre ellos varios científicos australianos, neozelandeses y tres latinoamericanos, quienes deben llegar a la isla australiana de Tasmania la próxima semana.
Los 52 pasajeros fueron rescatados el 2 de enero con ayuda de un helicóptero del rompehielos chino Xue Long, que los transportó al buque australiano Aurora Australis en un complejo operativo que se vio complicado varias veces por las condiciones meteorológicas.
Pero después el barco chino también se quedó atrapado en el hielo antártico, al igual que el navío ruso, lo que motivó a Australia a pedir ayuda a otro rompehielos estadounidense, hasta que el 7 de enero pudieron liberarse y navegar por sí mismos.
