Linda Gadea, directora comercial de la marca, nos compartió lo que no podemos perder de vista cuando se diseñan exteriores en áreas reducidas y cómo podemos convertirlas en el sitio perfecto.
Elementos naturales
Cualquiera de estas opciones nos pone en contacto con la naturaleza sin requerir grandes dimensiones. Ya sea una pared de piedra o bambú, crear un techo semi-abierto, o la incorporación de hiedra, palmeras o flores tropicales.
Tendencia
Lo de hoy es eliminar la fronteras entre exterior e interior; es decir, mezclar ambos espacios y crear un diálogo entre ellos para lograr mayor amplitud.
Mobiliario
Para que el espacio alcance su máximo potencial sin perder proporción, es preferible optar por piezas de mobiliario pequeñas o medianas que destaquen por su diseño. El reto es crear un espacio funcional sin que se vea sobrecargado. Una opción interesante es el de fibra con tejido abierto, que permite apreciar la pieza y el ambiente exterior.
Colores
Lo mejor es utilizar tonos neutros, tierra o paja, que imitan características de la naturaleza. Los acentos de color se pueden incorporar través de accesorios.
Materiales
El tamaño del lugar no es una restricción para la elección de los materiales, lo importante es que las piezas seleccionadas sean adecuadas para vivir en el exterior. El concepto minimalista se lleva muy bien con los espacios reducidos, hay que evitar recargarlo con cojines y piezas voluminosas. Se sugiere elegir mobiliario de fibra, metal, madera o piedra.
Decoración
Debe ser una continuación del resto de la casa, complementar la idea general de diseño que se tenga en el interior, no debe sentirse como un espacio aparte sino como un todo integrado.
Iluminación
El uso de quinqués de madera o metal con velas tiene un doble propósito: iluminar y adornar, es el complemento ideal.