A través de un elaborado y sofisticado nido de chocolate entretejido con distintas texturas y formas, es como el chef José Lazcarro representa el entorno del nuevo concepto gastronómico “Enigma” by Barro Azul, diseñado para presentar cocina de autor en todo su esplendor y en el que se conjugan la creatividad, la pasión y los sabores nacionales, todo en las manos de este renombrado chef mexicano.
Fiel a su compromiso de ofrecer las mejores experiencias vacacionales y a su búsqueda constante por la innovación y la excelencia culinaria, Grand Fiesta Americana Angelópolis ha lanzado esta nueva propuesta de alta gastronomía dentro de Barro Azul, un espacio al que Lazcarro define como una mezcla de matices poblanos y técnicas provenientes de diversos sitios en el mundo, sobre todo, francesas.

Sin embargo, lo que acá predomina es el aroma de los fogones poblanos, y para muestra basta probar uno de los clásicos sabores que se pueden encontrar en Enigma: el epazote que para el chef resulta “un ingrediente maravilloso arraigado a la cocina poblana” y al que Lazcarro hace un grandioso tributo mediante una trucha poblana envuelta en hojas de esta aromática planta.
Pero los platillos de “Enigma” by Barro Azul no son solo resultado de la creatividad de este maestro de la cocina, sino que dentro de cada presentación hay una historia que contar, como es el caso del rack de cordero que para Lazcarro tiene un significado sentimental y se ha convertido en un homenaje a todo su aprendizaje por ser de las primeras cosas que le costó dominar dentro de su formación, y que hoy es un plato de excelencia, no solo por su sabor, sino en todos los aspectos, como la presentación.
Otra muestra de la preservación de los sabores puros de los alimentos poblanos son las mollejas de ternera que Lazcarro prepara mediante una forma de cocción lenta y al alto vacío, y que son emplatadas con guacamole, jugo de res elaborado a base de huesos, con un delicioso toque picante que da distintos matices al platillo.
“La idea de crear este espacio fue reunir muchos sabores, los cuales fueran amigables con diversos productos locales y que enaltece la sazón poblana”, dijo el chef acerca del trabajo que hubo en el diseño del menú durante la apertura de este nuevo rincón gastronómico, cuya misión es recibir comensales no solo locales, también de distintos lugares del mundo, que no van en busca del picante y otros clichés de la comida mexicana.
Las clavesBarro Azul
Se distingue por su elegante cocina, en la que se degustan platillos creados por los chefs Ricardo Muñoz Zurita y José Lazcarro.
Cocina sensorial
La elaboración se basa en el respeto a los ingredientes para brindarle una experiencia sensorial al comensal.
Sabores mexicanos
Lazcarro crea una deliciosa armonía entre los aromas y las texturas de los ingredientes
En el menú, los viajeros y comensales podrán encontrar una diversidad de platillos elaborados a base de verduras, como la coliflor rostizada con aceite de trufa y la ensalada de betabel también rostizado, y muchos preparados con carne de cerdo, como la tostada de cachete de cerdo confitado; sin embargo, uno de los más solicitados es el risotto de pato.
El broche de oro lo dan los dulces sabores de una manzana compres con helado de vainilla o una tarta helada de toronja y cítricos ahumados, un postre que caracteriza a este lugar.
De esta forma cada platillo está acompañado de una selección de bebidas elaboradas por el mixólogo del hotel, mientras que el maridaje de vinos nacionales y cervezas artesanales es guiado por el sommelier, Ulises Barrios.
REPL