Temporada de lluvias, descenso en la temperatura; a quién no se le antoja un café o un chocolate caliente acompañado por una pieza de pan recién hecha. Raúl Morell García, presidente interino de la Cámara Nacional de la Industria Panificadora (Canainpa) en La Laguna, refirió que este clima en efecto, favorece el consumo de pan, incrementando su venta hasta en 50%, beneficiando a los miembros de este sector.
Para el empresario lagunero, la industria panificadora ha pasado un año difícil por la pandemia del covid-19, por el encarecimiento de la materia prima, por no incrementar los precios en apoyo al consumidor y por la situación en general que está pasando la población.
“Este año es más difícil que los anteriores por la pandemia. Muchos se quedaron sin trabajo, otros no recibían su sueldo completo y con el tiempo eso fue dando como resultado ventas menores en nuestros puntos menores, con nuestros clientes de la tienda de la esquina o tiendas de conveniencia bajando hasta en 40%”.
El contar con las escuelas cerradas, aunado a la temporada habitual de bajas ventas de cada año que es la temporada de calor, ha venido a complicar la situación del sector panadero de la Comarca Lagunera.
Sin embargo, Morell García expuso que la temporada de lluvia ayuda a incrementar la venta de pan blanco y dulce entre la población, favoreciendo a la industria local, repuntando la venta hasta en 50% en los momentos posteriores a las precipitaciones donde el pan se llega a agotar existencias.
Recordó que el último incremento se dio en noviembre del año pasado y hasta la fecha se ha sostenido con ciertas variaciones ya que el precio se basa en la oferta y la demanda, dándose precios sugeridos, sosteniendo el pan de dulce en 7.50 pesos y el pan blanco 6.50 pesos, variando dependiendo de cada panificadora, detalló.
EGO
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