Los australianos fueron de los primeros en descubrir este martes la nueva versión del videojuego Call of Duty, en el que el actor norteamearicano Kevin Spacey pone cara a un malvado mercenario.
La compañía Activision acaba de lanzar la nueva versión, "Call of Duty: Advance Warfare", un cara a cara entre los soldados del futuro y el mercenario encarnado por Spacey.
Michael Pachter, analista de videojuegos de Wedbush Securities, cree que la compañía Activision venderá 21 millones de copias de la nueva versión de Call of Duty este año, y un adicional de 2 a 3 millones de copias en 2015. Eso equivale a mil 260 millones de dólares en ventas este año para el juego que superó los mil millones de dólares en cada uno de los últimos cinco años.
Desde la salida en 2003 de la primera versión de "Call of Duty", este juego ha sido un gran éxito comercial con 100 millones de unidades vendidas, por un valor de miles de millones de dólares.
Los estudios Sledgehammer han modificado la mecánica del juego, dotando a los soldados de "trajes de exoesqueletos" que les confieren superpoderes.
Por otro lado, los movimientos y expresiones de Spacey fueron captados a través de un procedimiento especial para crear una versión virtual realista del actor que interpreta a Jonathan Irons, un mercenario que quiere dirigir el mundo.
La nueva entrega se vende a 60 dólares la unidad, con versiones especiales para las consolas de nueva generación PlayStation 4 y Xbox One y las computadoras que funcionan con el sistema operativo Windows.
Según EB Games, su distribuidor en Australia, los aficionados se apresuraron a comprar el juego.
"Decenas de miles de aficionados estuvieron presentes en el lanzamiento a medianoche y temprano por la mañana (de este martes) en todas las tiendas de EB Games en todo el país", indicó la directora de la marca en Australia, Debra McGrath.
El juego se desarrolla en 2054, cuando Atlas, una poderosa empresa paramilitar privada dirigida por el personaje de Spacey, está tratando de derrocar al gobierno. Tomado por el odio y la sed de venganza tras la muerte de su hijo, Irons se halla obsesionado por el poder, listo para llevarse por delante a todos en su camino.
Los jugadores encarnan el papel de soldados con capacidades de combate multiplicadas por 10.