Un equipo de científicos europeos desarrolló robots capaces de unirse, dividirse o, incluso, repararse a sí mismos sin perder sus funciones sensomotrices, según un estudio publicado en Nature.
Este trabajo, liderado por especialistas de la Universidad Libre de Bruselas, en Bélgica, abre la puerta en un futuro muy próximo a la aparición de robots que, de manera autónoma, podrán modificar su forma, tamaño y funciones.
Marco Dorigo, ingeniero italiano líder del proyecto, menciona que se trata de tecnología autónoma con sus propios sensores y actuadores desarrollados con el sistema operativo Linux y forman parte del proyecto europeo FET Open Swarmanoid.
Muchos tipos de autómatas, mencionan los científicos, están controlados por sistemas nerviosos robóticos cuyos sensores y transmisores están conectados a una unidad procesadora central.
No obstante, en la mayoría de esos casos, los sistemas están construidos para que se adapten de manera exclusiva a la forma del robot, lo que limita su flexibilidad, adaptabilidad y capacidades, precisan los expertos.
Sin embargo, los avances en coordinación y control se ven limitados por el hecho de que solo pueden generar un número específico de cuerpos colectivos con formas predefinidas.
“Aquí presentamos robots cuyos cuerpos y sistemas de control pueden unirse para formar otros completamente nuevos y retener todo el control sensomotriz. Nuestros modelos de control les permiten exhibir propiedades que van más allá de las de máquinas actuales o de cualquier organismo biológico”, destacan.
Estos autómatas de última generación pueden adoptar nuevas formas y tamaños en respuesta a una tarea específica o a un cambio de medio, al tiempo que son capaces de repararse a sí mismos retirando sus partes dañadas o reemplazándolas.
De cara a sus aplicaciones prácticas, los expertos confían en que servirán, por ejemplo, para detectar, mover y elevar objetos, como ladrillos de construcción, si bien en el futuro no será necesario construirlos para que desarrollen solamente una tarea específica.
“Este trabajo nos acerca un poco más a los robots que podrán, de manera autónoma, cambiar su tamaño, forma y función”, mencionan los científicos.