Una nueva batería de níquel-zinc (NiZn) recargable, con un rendimiento comparable a las baterías de iones de litio, puede ofrecer un medio más seguro y barato para almacenar energía, según un estudio publicado en la revista especializada Science.
El desarrollo, realizado por el Laboratorio de Investigación Naval de EU, y dirigido por Joseph F. Parker, se centró en hallar una alternativa más segura a la batería de iones de litio o batería Li-Ion.
Las pilas de iones de litio son una de las formas más populares de almacenamiento de energía, a pesar de sus problemas de seguridad, el suministro limitado de cobalto, los ingredientes de litio y el alto costo.
Sin embargo, según el estudio, las baterías acuosas recargables a base de zinc pueden proporcionar una alternativa, aunque resultan infestadas por la formación de fibras microscópicas de litio que pueden causar cortocircuitos y que han sido relacionadas con algunas explosiones.
Los ánodos de zinc son una estructura tipo esponja que no desarrolla dendritas, por lo que su estructura alcanza 90 por ciento de la capacidad del material y suponen una mejora de 50 por ciento sobre compuestos convencionales.
Los investigadores probaron así la capacidad de la célula como una batería de entrada y salida, que puede llevar a reemplazar las baterías de plomo en vehículos microhíbridos, y encontraron que la célula de níquel-zinc puede soportar más de 50 mil ciclos.
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