La Asamblea de Pueblos Indígenas del Istmo de Tehuantepec en Defensa de la Tierra y el Territorio (APIITDTT) acompañada de organizaciones de Derechos Humanos pidieron a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que cancele los permisos otorgados a Eólica del Sur para la construcción de un parque de aerogeneradores en los municipios de Juchitán y El Espina en Oaxaca.
Advirtieron que el proyecto de resolución que piensa presentar el ministro José Ramón Cossío el miércoles de la próxima semana avala la “simulación” de una consulta realizada en las comunidades durante 2014, la cual acusaron no fue libre, previa e informada, como estipula el artículo 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Además aseguraron que se realizó un ejercicio que no fue culturalmente apto con el agravante de que la secretaría de Energía ya habría otorgado los permisos necesarios a la empresa antes de la consulta, relegándola a un “un mero trámite”.
De acuerdo con los activistas, la construcción de Eólica del Sur contaría con inversiones de empresas como la armadora automotriz Mitsubishi y FEMSA, que participa en el mercado mexicano con Coca Cola y Oxxo.
"Nos preocupa el sentido en el que viene este primer borrador porque prácticamente es contrario al estándar de la consulta previa, libre e informada, entonces marca un precedente que no viene a resolver el problema que están viviendo actualmente las comunidades en temas de mega proyectos", lamentó Felipe Romero del Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA).
Los defensores de Derechos Humanos advirtieron que el proyecto del ministro Cossío, prácticamente "es lo mismo que propuso, en su momento, un juez de distrito en Salina Cruz", que termina por avalar el proceso de consulta implementado por la secretaría de Energía en 2014, el cual en su opinión está viciado de origen.
De acuerdo con los activistas, desde 2007 en la zona del Istmo, predominante zapoteca, se han construido 24 parques eólicos, que representan mil 915 aerogeneradores, sin consultas previas a las comunidades originarias. La construcción de Eólica Sur sería la primera tras la Reforma Energética y la primera tras realizarse una consulta a las comunidades.
Los defensores de Derechos Humanos señalaron que el proyecto tiene muchas "deficiencias" desde que se planteó formalmente, incluso acusaron que es una copia del proyecto Mareña Renovable, que fue desechado en 2013, luego de que el juzgado séptimo de distrito en Oaxaca dio la razón a los indígenas que argumentaron un incumplimiento de lo estipulado por los tratados internacionales en materia de consulta.
Antes con Mareña Renovable y ahora con Eólica del Sur, se pretende construir el parque eólico más grande de América Latina con 132 aerogeneradores de 3 MW cada uno para una capacidad total a instalar de 396 MW, que se ubicarían en área aproximada de 5 mil 332 hectáreas.
Los habitantes que se han opuesto a la construcción del parque eólico, también denunciaron que han sido agredidos físicamente, amenazados y perseguidos por gente que dice defender los intereses de la empresa mexicana, además de que el Estado ha "criminalizando" su protesta, antes, durante y después de dicha consulta.
“La violencia está documentada, no sólo por nosotros, sino en investigaciones que ha hecho el Banco Interamericano de Desarrollo, la violencia que tenemos en los pueblos indígenas ha sido ocasionada por estos proyectos”, sostuvo Bettina Cruz.
Demandas por despojos de parte de las empresas a los pobladores, otras por agresiones, son parte de "todo ese proceso de criminalización donde el estado está poniendo en manos de las empresas las leyes para poder criminalizar a los que estamos defendiendo el territorio", agregó la activista originaria de la región.