En el año se han detectado cinco cocodrilos en las inmediaciones del parque Bicentenario de Madero, por lo cual se optó por poner trampas que eviten la llegada de los saurios.
Ana Martínez Bautista, administradora del parque, refirió que llegan por medio de un canal pluvial y que se tuvo que poner rejas de ambos extremos del dren para evitar la que se sigan metiendo.
Dicho canal se encuentra a un costado del parque que tiene una pequeña laguna artificial, por lo cual se extrema la vigilancia para que ningún cocodrilo ingrese al parque.
Los cocodrilos llegan a través de los drenes conectados en las colonias como Sahop y Candelario Garza, que en temporada de lluvias traen cantidades importantes de agua.