Mientras los habitantes de la colonia Santiago Ramírez sufren de desabasto de agua en sus hogares, el líquido se desperdicia cada día a través de una fuga ubicada en la calle Carlos González casi en el cruce del bulevar Laguna.
Con la temporada de calor la demanda del servicio crece en gran medida, por lo que se ven obligados a resguardar agua diariamente para poderla utilizar por las tardes, cuando más escasea.
Aún así el suministro en las tomas domiciliarias no es suficiente, por lo que las labores domésticas de limpieza e higiene se complican más en algunos negocios se han visto obstaculizadas las tareas para operar.
Esperan que el Sistema Municipal de Agua y Saneamiento atienda el reporte que ya han interpuesto, pues a dos semanas de que surgiera la abundante fuga no han recibido atención.
