El festejo más grande en la doctrina católica, la vigilia pascual de la resurrección de Jesucristo ocurrió la noche de este sábado en la Catedral Metropolitana de Guadalajara. Los fieles se reunieron en el Santuario que estuvo a oscuras durante la primera parte de la celebración eucarística.
El silencio y la poca visibilidad predominaban al interior de la sede católica en Jalisco. La luz al interior llegó con el ingreso del fuego a la iglesia que prendió el cirio pascual que simboliza a Jesús resucitado.
La vigilia estuvo presidida por el arzobispo de Guadalajara, Francisco Robles Ortega quien vestido de de blanco mostró la alegría de la fe católica por la resurrección de Jesús. Durante la vigilia fueron leías siete lecturas del antiguo testamento y dos del nuevo testamento. Además fue bendecida la fuente bautismal y los cirios que los creyentes llevaros.