La población mexicana presenta importantes índices de subnutrición, deficiencia calórica en los sectores vulnerables y desnutrición, destacaron en el Instituto de Ciencias Agropecuarias y Rurales (ICAR) de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM). Los especialistas Benito Ramírez Valverde, José Pedro Juárez Sánchez, Claudia Apodaca González y Mónica Ramírez Huerta consideraron que la ganadería de traspatio es una opción viable para solucionar este problema.
Afirmaron que ante las problemáticas de pobreza e inseguridad alimentaria, es necesario adoptar el enfoque territorial del desarrollo rural; con ello se pretende que no sólo se dirija la política pública al sector agrícola, sino también al pecuario de traspatio, así como a las actividades de corte no agrícolas, para fomentar la seguridad alimentaria entre la población con menos recursos económicos.
Al reunirse con alumnos, académicos e investigadores del ICAR, Ramírez Valverde, Juárez Sánchez, Apodaca González y Ramírez Huerta aseguraron que ante las grandes carencias de la población rural, el traspatio es importante en la producción de alimentos y también puede contribuir a disminuir la pobreza de la población rural y especialmente la indígena, pues los productos obtenidos se dedican principalmente al autoconsumo y el excedente va al mercado local.