Juan Carlos Deras, Director de Sanidad Vegetal en la Secretaría de Ganadería y Desarrollo Rural del Gobierno de Durango, comentó que son 14 mil metros cuadrados de inactividad en sembradíos de chile en los municipios de Nombre de Dios y Poanas.
Deras, comentó que ya se espera controlar la situación, aunque indicó que no es sencillo el trabajo porque el trabajo se agravó en un momento determinado y ahora es cuestión de tiempo que se logre el reflorecimiento de los cultivos dañados.
Dentro de las acciones que se realizan, lo primero es revisar las parcelas dañadas, conocer el nivel de daño de cada una, después que se levantó la cosecha de la temporada pasada y en seguida se verifica en qué lugares se encuentra viva la plaga en estos momentos.[OBJECT]
En este punto se aplican las medidas de sanidad por medio de fórmulas químicas pertinentes, pero principalmente, se realizan fumigaciones para que en el instante de sembrar, se cuente con la garantía que florecerá el cultivo de frijol.
Y aunque indicó que es complicado el contabilizar la cantidad de hectáreas dañadas, porque es amplío el territorio y variable el nivel de daño en cada uno, indicó que se toman las precauciones necesarias.
Explicó que lo que se busca es que los campesinos queden conformes con el trabajo que se realiza por parte de la dependencia estatal y que se logre en la medida de lo posible, el recuperar el tiempo de siembra.
En el momento de ser cuestionado sobre si existe el riesgo que se pierda la cosecha, aseveró que ese es el propósito principal es que se alcance la calidad requerida para el mercado de la producción.
Además, que se registren menos pérdidas por plagas que se generan en los cultivos, finalmente explicó que las acciones se realizan para que los productores locales hagan rendir su cosecha y se enfoquen en el mercado del chile.
ldv