El arco de bienvenida de la ciudad de El fuerte, cabecera del municipio del mismo nombre, es lugar que, desde el 2014, es el punto de inicio de la llamada marcha “Por Nuestro Desaparecidos” y que este año reunió a más de 120 madres y familiares de desaparecidos.
Fue en este sitio donde hace nueve años, Roberto Corrales Medina, hijo de Mirna Nereyda Medina, desapareció cuando vendía accesorios para autos.
Desde ese momento, Mirna salió a la calle o a cualquier lugar que le diera una pista para encontrar a su hijo.
“Venir aquí cada año de acto de dolor, porque fue aquí donde se vio por última vez a mi hijo, a Roberto. Desde hace nueve años hacemos esta marcha, es una marcha en silencio, en la que exigimos verdad, justicia y sobre todo que ya no tengamos desaparecidos. Nueve años de búsqueda, nueve años de incertidumbre, nueve años de dolor, pero aquí vamos a seguir”.
Pero no solo desaparecen los hijos, también los padres, como Bladimir Castro, por quien su hija clama información para dar con su paradero.
“Hoy se cumplen diez años que no sé nada de mi papá, lo único que quiero es saber dónde está y quiero ir a un lugar y llevarle una flor, una veladora, es lo único que quiero y le pido al que sepa dónde está que me diga, lo único que quiero es saber dónde está, no pido justicia, no pido nada, lo que le hicieron, lo que sea, yo lo único que quiero saber es dónde está”.
Dicho colectivo es el primero fundado en el estado y uno de los primeros del país, en sus registro tienen información de más de tres mil 100 personas desaparecidas solo en el norte de Sinaloa y de los cuales han logrado recuperar 600 restos humanos, principalmente en fosas clandestinas, pero, apenas 400 han podido ser identificados y regresados a sus familiares.
Según información del secretariado ejecutivo del Sistema Estatal de Seguridad Pública del gobierno de Sinaloa, hasta agosto del este año se tienen registradas la desaparición de 702 personas en la entidad, una numerología que, para las madres, en realidad pudieran existir el triple de desaparecidos.
“El problema es que las familias no se atreven a ir a la Fiscalía porque es un mundo de preguntas y pues los revictimizan, entonces nos van a avisar nosotros, a los grupos de búsqueda” mencionaron durante la marcha.
La desaparición forzada es un tema complejo que ya está presente en todo México y que, a decir de las propias madres, le puede suceder a cualquiera, no solo a quienes forman parte de los carteles mexicanos.
“Hoy en día la sociedad entiende que cualquiera de nosotros puede ser desaparecido, no tienes que andar mal o hacer algo malo para que estés desaparecido”.
VJHM