La autora duranguense Liliana V. Blum aborda el amor desde la perspectiva de su protagonista, y con la cual titula su obra: Pandora (Tusquets, 2015). Todo empieza cuando Gerardo, un ginecólogo que tiene gusto por las mujeres obesas, pero que lo mantiene reprimido, conoce a Pandora, entonces su mundo cambia, y sus obsesiones también, pues empieza a alimentarla cultivando su placer por la parafilia.
Su objetivo es que ella ya no pueda levantarse ante su excesivo volumen. De esta obra nos platica la autora que estará hoy en la Feria Internacional del libro, en la sala D, a las 16:30, en Cintermex.
¿Se pude decir que uno de los temas de la obra son las obsesiones?
Gerardo es un ginecólogo que está atrapado en el placer de ver alimentar a su nueva conquista. Él está muy insatisfecho en su matrimonio, pues su esposa Abril está siempre a dieta, ella era gordita, y entre más baja de peso, menos le gusta a él, y entonces aparece una recepcionista, que es una chica muy gorda, quien proviene de una familia en la que su mamá y hermana son casi perfectas. Y ella pues ha sufrido mucho el rechazo.
Esta parafilia, en la que existe este gusto de hombres por las gordas y excitarse al verlas comer, es su obsesión al conocer a Pandora, y ese riesgo excitante aparece en su vida hasta que ella no se pueda a levantar. Es también como el placer en ella de poner la vida en manos de otro. Al final, la esposa empieza a rastrear y descubre todo.
Y el tema de la parafilia, que es fuerte, ¿cómo lo fuiste vislumbrando para tu obra?
Hubo como quien dice dos temas que detonaron la obra. Cuando estudié, durante la carrera conocí a un español muy guapo, delgado, y siempre traía novias gordas, y años después descubrí esta parafilia. Supongo que habrá muchos hombres que gustan de eso y no lo dicen.
Pero la comida es también un tema de la obra...
El tema que hay es el de las expectativas sociales, y es que ninguna mujer puede comer sin culpa. Los hombres también desde luego, pero en el caso de las mujeres se da más. Siempre estamos viéndonos si aumentamos de peso; si eres gorda ya no vales, se piensa, por ejemplo. No conozco a alguna mujer que no esté obsesionada con eso.
¿Al también tocar un tema médico hiciste trabajo de investigación?
No me meto en cosas tan técnicas porque no hace falta, lo que sí trato de hacerlo es un poco creíble. Y sí hice muy poquita investigación, pero es muy de sentido común. Pero en realidad a mi me gusta más explorar la naturaleza humana, siempre te da un sinfín de cosas, me gusta cuestionar la naturaleza.
¿Y qué piensas de este tema que es muy actual, tal cual lo abordas en tu novela?
En el caso de las relaciones en general mientras no se haga daño a terceros y todos los demás estén de acuerdo no debe haber problema, o si te gusta que te den de palos o hacer lo que al otro le plazca, en el caso de Pandora como que ella dice que sí por amor.
Ella es una mujer que nadie ha amado y accede por darle gusto a Gerardo, y él sí está mal.
¿Qué piensas de la obesidad?
Yo viví 15 años en Tampico y dicen que es el estado con más obesidad en el país. Cuando estudiaba casi la mitad del salón eran gordos, creo que sí es un problema generalizado, tanto por falta de ejercicio o de sana alimentación.
Pero junto con esa creciente obesidad también está la obsesión por bajar de peso.