Morena y el PRD cuestionaron la designación del ex gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila, como nuevo dirigente del PRI en la Ciudad de México, ya que consideraron que es un “castigo” y una “muestra de desprecio” a los capitalinos.
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Para el dirigente de Morena en el Estado de México, Horacio Duarte, el nombramiento Ávila "es un castigo que deprecia su trabajo, una degradación política, y significa descartarlo de cualquier candidatura".
"Con eso está totalmente descartado y aunque se mencionaba que podía ir al gabinete federal, está lejos de ser reconocido. Ávila está recibiendo un castigo por parte del presidente Enrique Peña Nieto", agregó.
El también representante de Morena ante el Instituto Nacional Electoral (INE) rechazó que la llegada del ex gobernador del Estado de México represente un riesgo para Morena, porque ha habido otros dirigentes priistas que han sepultado sus aspiraciones en la Ciudad de México.
"Los habitantes de la capital del país son ciudadanos libres, muy conscientes y terminarán enviando a Eruviel, junto a su partido, al cuarto o quinto lugar de la preferencia electoral", afirmó.
Afirmó que "con la carga de corrupción del PRI nacional, de los escándalos de la Casa Blanca y del uso de helicópteros al amparo del poder público, la gente ha demostrado que no se deja engañar y menos con un operador como Ávila".
Por su parte, el presidente del PRD en la Ciudad de México, Raúl Flores, dijo que el nuevo cargo de Ávila pone al PRI en una posición y percepción aún más negativa.
Aseguró que es un castigo a los priistas capitalinos y una muestra de desprecio para todos los habitantes de la Ciudad de México, ya que el ex gobernador del Edomex contribuyó a que ese estado se convirtiera en una de las entidades más inseguras y con mayores índices de pobreza, impunidad, injusticia y corrupción del país.
Agregó que, el ex gobernador del Estado de México, es un personaje que encarna el conservadurismo y el populismo, "muestra de ello es que por un lado criminaliza a las mujeres que interrumpen su embarazo, pero por el otro durante su mandato no hizo nada por contener la elevada cifra de feminicidios".
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Añadió que de los 32 estados de la República, el Estado de México es el que tiene el porcentaje más alto de población (76%) que percibe a la inseguridad y a la delincuencia como el peor problema, según el INEGI.
“Con Eruviel el PRI perderá lo poco que logró avanzar en el 2015. Extrañamente sustituyen a una presidenta que por lo menos representaba al sector femenino y a los jóvenes y que, aunque desde el PRI, tenía una visión más fresca", concluyó.
JASR
