María de Lourdes Escareño de 44 años de edad, actualmente atraviesa una situación difícil debido a que por la contingencia por coronavirus, perdió su empleo en una cafetería, por lo que ahora para ayudarse vende tortillones.
Relata que como hace poco padeció cáncer de mama, tuvo que bajar la producción, pues no puede hacer mucho esfuerzo y estar tanto tiempo frente al fuego, sin embargo, con el apoyo de una hija y su mamá, lo retomará para que los matamorenses que deseen apoyarla, hagan ya sus pedidos al número de celular 8715353098.
Explicó que hace tres años le detectaron el cáncer de mama y en estos momentos está en tratamiento constante. A excepción del dolor de piernas que le han dejado los fármacos que le suministran para los siguientes cinco años, está bien, sólo un tanto desesperada por la situación económica que enfrenta.
Plática que lamentablemente cuando el dinero falta o escasea, los problemas no faltan y ahorita debido a que ella no trabaja y su esposo que trabaja de velador, recibe menos sueldo. Viven una situación “muy apretada”.
Se casó muy joven, tiene tres hijos, la menor es mujer y está en el nivel medio de estudios, por lo que con lo que su esposo gana salen adelante.
Dijo que antes de que comenzara el coronavirus, pensó poner un negocio en la calle Guillermo Prieto número 303, que es la casa de su mamá, sin embargo, con la situación observa que a los locales les va mal o venden poco.
“Pensaba poner un puesto de gorditas, pero es un mal momento, incluso ni para vender frituras”, aunque dijo que sí la gente se lo piden, elaborará los tortillones.
AARP