La CROC de Nuevo León continúa dividida, existen dos comités estatales, pero sólo el que encabeza Alberto Serna de León, tiene el reconocimiento de la Secretaría de Trabajo, el otro sigue sin la legalidad que se requiere.
Sin embargo la dirigencia nacional de esa central obrera, a cargo de Isaías González Cuevas, le negó el respaldo a los Serna y se lo dio a los disidentes, que encabeza Jorge Gloria Oballe.
Pero las autoridades estatales siguen con la posición del edificio sede de los croquistas que se construyó con recursos de todos los agremiados, cuando el dirigente era Eleazar Ruiz Cerda.
En este contexto, los protagonistas están conscientes de que el respaldo que más valor tiene es el de la autoridad federal, o sea la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS).
El dirigente con reconocimiento de dicha dependencia a través de su toma de nota, Alberto Serna de León, considera que el inmueble ya les debe ser liberado por la Fuerza Civil, que depende del Gobierno Estatal.
"Si ya son tres semanas o más que la STPS no le ha dado su aval a la toma de nota de la dizque dirigencia estatal, pues no hay motivo para que lo mantengan custodiado las autoridades", precisó.
Comentó que obran en su poder dos documentos en los que se otorgó el reconocimiento, con la toma de nota, a los croquistas que forman parte de su liderazgo.
"Y el otro fue la confirmación oficial también de que constituimos el único comité directivo estatal que tiene el respaldo oficial de esa dependencia federal", advirtió Serna de León.
Comentó que ya han tenido diálogo con el Gobierno Estatal, concretamente con el Secretario General de Gobierno, Manuel González, quien está enterado de que ellos y no el otro comité directivo, cuenta con el reconocimiento federal.
"Nos dijo el secretario general que tuviéramos calma, que pronto tendremos nuestra casa (el edificio sede de la central obrera), de manera que esperamos que esto se lleve a cabo lo antes posible", precisó Serna de León.
Por su parte, Jorge Gloria Oballe, se abstiene de declarar argumentando que ya tienen solicitud en gestiones ante la Secretaría del Trabajo para que se les otorgue la toma de nota, requisito indispensable para operar.
También asegura que son legales las asambleas que se celebraron, una para destituir a Alberto Serna de León y la otra para designar la nueva dirigencia que él preside.
Sin embargo, no hay documento oficial que respalde el resultado de esas dos asambleas.
En resumen, la CROC sigue dividida, con dos dirigencias estatales, una con reconocimiento oficial, la otra avalada por la dirigencia nacional, pero sin documento de por medio.