"Desconocemos lo que va ser el apagón analógico, al menos en mi ejido La Goma, municipio de Lerdo, Durango, no sabemos qué va a pasar, en mi casa yo tengo dos televisiones, son de las de cinescopio", dijo María López, al cuestionarla sobre el cierre de la señal analógica de televisión.
"Tenemos unas teles normalitas y corrientitas, por lo que perderemos la señal de las televisoras, pero eso a que se debe son las ayudas del gobierno, no debe de ser porque todos estamos pobres".
En el campo hay mucha gente pobre que no tiene dinero para darse el lujo de comprar una pantalla o un decodificador de señal.
"Además tenemos muchos niños en la escuela, hay gastos, a veces los señores no tienen trabajo y pienso yo que no está bien para la gente humilde".
En mi casa, viven además de mi marido, [OBJECT]mi hija y mi nieto, tenemos dos televisiones de las normales.
El precio del decodificador, es muy alto y algunos comerciantes oportunistas están aprovechando el momento y lo suben de precio, "esto ya se está convirtiendo en un negocio".
"Pero tenemos que acostumbrarnos a lo que tenemos ya ni modo así nos tocó vivir".
Por otra parte María Luisa Martínez, del ejido San José de la Niña, dijo que desconoce el precio del decodificador, que ya están vendiendo en las tiendas.
Aunque admite que tiene una pantalla de televisión, no sabe si va a comprar el decodificador, pero dijo que la señal de televisión se capta bien en su pantalla.
Asimismo consideró que ha faltado más información sobre el llamado "apagón analógico", al menos en esta región.
"En el ejido ya pasaron algunos comerciantes ofreciendo la antena y el codificador, pero la verdad no puse atención en los precios", dijo María Luisa.
Comentó que: "en una vuelta que demos por Torreón, vamos a preguntar cómo está lo del decodificador".
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