Después de convalecer por malestares cardíacos, el sacerdote Miguel Ángel Cervantes, párroco de la Iglesia de Santa Cecilia en Las Julietas de Torreón, falleció este domingo cerca de las 14:00 horas en un hospital.
Destacó en su labor de maneras que no todos los sacerdotes plantean. Su trabajo comprometido con los migrantes, le otorgará sin duda un lugar en ese Cielo en el que los hombres buenos están después de pasar a la vida eterna.
Así mismo, desarrolló pastoral penitenciaria brindando atención a las personas que se encuentran en la cárcel por algún motivo, justo o injusto, sin juicios de valor. Atendió a jóvenes drogadictos y en proceso de recuperación.
El sacerdote Miguel Ángel era generoso, en un turbio momento en el que se presentó en Torreón el llamado Circo de las Pesadillas, condenado por grupos bajo acusaciones de ser satánico, el sacerdote no dudó en realizar una bendición de este lugar, bajo los términos de que se trataba de un lugar en el que muchas personas se ganaban la vida dignamente.
La Diócesis de Torreón fue quien informó sobre su deceso a través de redes sociales.
ldv