El campo Guillermo Arteaga se llenó completamente, tanto que las gradas fueron insuficientes para albergar a quienes fueron a despedir a Manuel "El vaquerito", que muriera el pasado jueves cuando fuera arrollado junto a más miembros de una peregrinación religiosa.
El niño era prospecto a un beisbolista destacado, como su hermano Edgar Hernández, seleccionado del campeonato mundial juvenil de beisbol y del equipo panamericano juvenil mexicano.
Entre gritos a una sola voz la comunidad beisbolera de la colonia Tancol, pidieron a las autoridades justicia por el homicidio del menor.
Por la mañana, a las 9.30 se ofició en la capilla de la colonia Tancol una misa para el pequeño,esto a las 9.30 de la mañana,
A la despedida en donde se reunió gran parte de la comunidad beisbolera de Tampico, también asistió el alcalde Gustavo Torres, quien recibió las peticiones de justicia en torno a la tragedia que enlutó a una familia y a la sociedad deportiva.
Tras un homenaje recibido por más de tres mil persona, el féretro fue llevado al camposanto en donde descansará su alma por parte de los Judas, una tradición católica típica de la colonia.
Sería este día al medio día que realizarían la quema del diablo en el campo se beisbol en donde práctico este deporte de manera sobresaliente mientras que el causante de esta tragedia ya fue consignado ante el juez segundo de lo penal en ciudad Madero, por los delitos de homicidio y lesiones.
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