Para algunos expertos en sustentabilidad del agua, lo que el gobernador Jaime Rodríguez diga sobre Monterrey VI es un doble discurso, pues consideraron que existe una concesión vigente de traer agua del río Pánuco, lo cual atenta contra cualquier otra intención que asegure tener.
En entrevista, Antonio Hernández, integrante del movimiento en contra de Monterrey VI, indicó que el mandatario estatal engaña a la ciudadanía desde el momento en que no se atreve a cancelar la concesión del proyecto hidráulico.
"En sus contradicciones hay que considerar que mantiene vigente la concesión para traer aguas del río Pánuco, en forma y fondo, eso significa que el trasvase de aguas desde esa cuenca a nuestra ciudad está vigente.
"Cualquier cosa que diga son engaños o doble discurso; entonces esa decisión hay que valorarla con las explotaciones de gas por fractura hidráulica que vienen para Nuevo León, ocupan agua y esa agua es la del Pánuco", aseguró.
Hernández consideró que el Fondo del Agua Metropolitano de Monterrey (FAMM) no tomó en cuenta a los ciudadanos y a los técnicos para exponer sus propuestas de alternativas sobre el abastecimiento del agua.
"No, nada (de apertura a la ciudadanía). La claridad o el acceso a la información en torno a cómo se deciden las fuentes de agua es nula; se avisó por parte del FAMM de un proceso en el que seríamos informados e incluidos, y tampoco ocurrió por ambas vertientes.
Los procesos de decisión son a espaldas de la comunidad", señaló.
Al respecto, reclamó que el FAMM representa sólo los intereses de empresarios locales.
"Si analizamos por sus integrantes, creo que no (está representado por ciudadanos) porque prevalece la representación de las grandes empresas de la ciudad, aunque luego digan que incluyen a la sociedad civil, no lo hacen".
Antonio Hernández dijo que en diversas ocasiones han solicitado audiencias con el mandatario estatal y éste no ha respondido.
"Queremos evidenciar que habla con falsedad el gobernador diciendo que no proponemos y que nada nos parece... Por escrito pedimos audiencia para hablar del tema con él y, o no respondía, o faltaba a la cita", concluyó.
Agregó que su movimiento exigió inclusión en el análisis que hizo el FAMM y nunca recibió respuesta, situación que los obligó a quejarse ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH).