La cuesta de enero aunado a la baja de clientes en el centro histórico de Nuevo Laredo, ha ocasionado que los bares, cantinas y centros nocturnos, se encuentren en una difícil situación económica, así lo dio a conocer René Molano Molina, presidente de los comerciantes de dicho rubro.
Molano Molina, mencionó que en Nuevo Laredo desde el 2003, el negocio de bares, cantinas y centros nocturnos ha ido disminuyendo considerablemente, ya que se contaba con un total de dos mil 500 establecimientos en la ciudad fronteriza, pero derivado de la baja venta e inseguridad que prevaleció durante varios años se han venido reduciendo hasta quedar en 990 registrados durante el 2014 en la oficina Fiscal del Estado.
"El 28 de febrero es cuando nos damos cuenta cuantos negocios dejaron de operar, ya que es la fecha limite que tenemos para renovar la licencia de alcoholes ante la Oficina Fiscal del Estado".
El presidente de los comerciantes, los invitó para que se anoten y participen en el apoyo que está brindando la Secretaria de Finanzas en el Estado, en el régimen de pago en seis parcialidades de la licencia de alcoholes, ya que el plazo vence en el mes de febrero.