Aunque la aprobación de la ley anti tabaco en el estado, por parte del Congreso Local, va contra los estándares internacionales, el arzobispo, Rogelio Cabrera López puntualizó que si esta ley es publicada en la entidad, debe ser respetada por todos los restauranteros.
Agregó que, son de especial importancia los temas de cuidado a la salud y distribución de los espacios en donde se puede fumar, para evitar no solo dañar la salud de otras personas y comensales, sino incomodar a quienes acuden a los espacios públicos, apelando al sentido común.
En este mismo tema, el prelado llamó tanto al Congreso como a las autoridades estatales (como la Secretaría de Salud, que amenazó con vetar esta ley) a trabajar en conjunto y no caer en una lucha de poderes.
"Que ellos platiquen, creo que hay que ventilar el problema viendo lo que sucede en el mundo y en México", aseguró.
Recuerda importancia de la familia
Por otra parte, ante el incremento de casos de violencia intrafamiliar, Cabrera López señaló que es un tema que preocupa a la iglesia católica de Monterrey, ya que puede afectar al tejido social del estado de Nuevo León.
En rueda de prensa dominical, el prelado argumentó que es importante que los padres de familia recuerden la importancia de mantener un ambiente sano para sus hijos, y los llamó a reconstruir el círculo social en el que viven actualmente.
"Cualquiera que sea la circunstancia que viva cada familia, para ellas estamos la iglesia y está el Gobierno, siempre pensamos en cada familiar. Porque la única manera en que los individuos pueden alcanzar la estatura que merecen, es cuando los individuos pueden disfrutar el desarrollo y la dignidad en la familia. Por eso esta navidad les pedimos a los padres de familia y a los hijos, que velen por la unidad de la familia, como la familia de Nazareth, ya que debe ser una preocupación de todos nosotros", aseguró el arzobispo.
Cariño, amor y misericordia deben ser entonces los principales ejes en los que se fomente el tejido familiar, consideró Cabrera López. Recordando que actualmente, esta última, es la cualidad que la iglesia católica, en todo el mundo, está llamado a tener más presente.
Debido a esto, el arzobispo hizo un llamado a "abrir el corazón y dejar el egoísmo", y así poder mejorar las condiciones de las familias en la entidad, y evitar que los índices de violencia sigan a la alza.