El gobierno de Jalisco, a través de la Secretaría de Salud (SSJ) tiene casi lista la Estrategia Estatal Contra la Obesidad y la Diabetes, que en cascada del modelo nacional presentado en octubre de 2013 por el presidente Enrique Peña Nieto, se lanzará en la entidad en abril, con el mismo objetivo: el combate a estas enfermedades crónicas.
La preocupación no es menor: la obesidad mantiene a México en el primer lugar de niños con sobrepeso y en el segundo de adultos obesos entre los países miembros del OCDE.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2012, que refiere que más de cuatro millones de niños y niñas de entre cinco y once años tienen sobrepeso u obesidad.
La SSJ realizó en 2013 un nuevo diagnóstico nutricional de niños y niñas en escuelas, cuyos resultados se darán a conocer al lanzar la estrategia en la entidad; aunque un ejercicio similar, encabezado por el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, permite adelantar cifras: a través de un programa de abordaje integral en estancias infantiles y escuelas, este instituto detectó sobrepeso en 85% y obesidad en el 3% entre 7 mil 350 menores de edad evaluados.
Los especialistas se muestran escépticos de los resultados obtenidos hasta ahora en este combate, pues al igual que el Acuerdo Nacional para la Salud Alimentaria: estrategia contra el Sobrepeso y la Obesidad, impulsado por el presidente Felipe Calderón en 2010 –aún vigente-, la nueva estrategia avanza a paso lento y se requiere de decisiones políticas más contundentes, por encima de los intereses de la poderosa industria alimenticia, para desalentar la venta y consumo de comida chatarra. No sólo en las escuelas.
Tal fue una de las conclusiones de los expertos que participaron dentro del XVI Congreso Internacional Avances en Medicina, organizado por el Hospital Civil de Guadalajara (HCG), donde se abordó la problemática de la obesidad infantil en aspectos como prevención, resultados de la aplicación de las guías nacionales de nutrición en escuelas mexicanas y acceso a recursos para la actividad física infantil, que culminaron con una mesa redonda.
Marisa Ramírez Ruiz, encargada del Servicio de Endocrinología del HCG, resume que en el combate a la obesidad “se debe ir mucho más allá del listado con la oferta de alimentos permitidos que se venden dentro de las escuelas; con acciones integrales, que incluyan cambios en todos los niveles, legislativos, económicos y culturales e involucre estrategias para cambiar hábitos en la sociedad”.
Sostuvo que los cambios en el patrón de alimentación, son la principal causa de lo que se ha llamado “la epidemia del siglo XXI”, y llevaron al incremento de la obesidad en apenas veinte años, por lo que no se puede hablar de combate sin la participación de la industria.
“La recomendación de los ponentes fue que como médicos incidamos en las decisiones del gobierno en cuanto a legislación, motivar a la industria alimenticia a cambiar la oferta, no sólo a reducir porciones”, apuntó.
Recordó que no debe perderse de vista el alto costo de esta enfermedad que propicia padecer hipertensión, enfermedades del corazón, insuficiencia renal, diabetes, trastornos hepáticos y cáncer, entre otros padecimientos.
Avances
Contener dicha “epidemia” fue el objetivo del gobierno federal encabezado por Felipe Calderón quien impulsó el Acuerdo Nacional para la Salud Alimentaria: estrategia contra el Sobrepeso y la Obesidad (ANSA), en 2010, que comenzó una serie de acciones regulatorias y estableció los lineamientos generales para el expendio o distribución de alimentos y bebidas al interior de los planteles de educación básica (las ‘tienditas’ o Centros de Atención y Servicios, CAS); así como una serie de acciones para promover una alimentación saludable y vida activa.
De acuerdo con Elisa Esmeralda González Navarro, nutrióloga adscrita a la SSJ, el ANSA –aún vigente- permitió contener el incremento del 1.1 por ciento anual en la prevalencia de obesidad registrado desde 1999. La entrevistada admitió que no se ha ganado la batalla, pero sí se frenó esta espiral ascendente de niños con sobrepeso/obesidad.
Explicó que las intervenciones en las escuelas van por etapas: la primera fue de evaluación, la segunda de regulación de los CAS y la tercera y cuarta, que se llevarán a cabo este año, monitorear las porciones reglamentadas e imponer sanciones.
Destacó que se incorporaron licenciados en nutrición y activadores físicos a la SSJ, para impulsar las tareas de promoción.
La tarea es enorme: 52 profesionistas deben trabajar en escuelas, realizar un diagnóstico nutricio, identificar factores de riesgo de los niños y realizar pláticas y talleres.
Sobrepeso en población infantil
- Las tasas de sobrepeso y obesidad en niños en edad escolar, se dispararon: de 18.4 por ciento en 1999 a 26.2 por ciento en 2006
- Lo anterior representa una razón de 1.1 de incremento porcentual por año
- En 2012 se reportó una prevalencia de 26.6% de niños con obesidad y 20.8% con sobrepeso
- En las niñas, la cifra de obesidad es de 20.2% y el de sobrepeso de 19.7%
- Entre los adolescentes varones, el porcentaje de obesidad es de 10.6% y de 20% el de sobrepeso
- En las adolescentes, tienen obesidad 23.7% sobrepeso 22.5%
Las políticas propuestas
Acciones destacadas:
- Establecer los lineamientos generales para el expendio o distribución de alimentos y bebidas en los establecimientos de los planteles de educación básica, un listado de productos y porciones permitido
- Promoción del uso de agua potable como principal bebida hidratante, mediante la disposición de bebederos en las escuelas
- Incentivar el consumo de frutas y verduras
- Desalentar el consumo de bebidas endulzadas (refrescos, jugos, néctares y otras que contengan endulzantes calóricos)
- Desmotivar el consumo de alimentos con alta densidad calórica (botanas, galletas, panes y pastelitos industriales, entre otros).
- Recomendar la reducción de grasas, azúcares y sal
La Estrategia Nacional para la Prevención y el Control del Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes.
Enrique Peña Nieto, octubre 2013
Acciones destacadas:
- Generar amplias campañas de educación alimentaria y activación física
- Mejorar el monitoreo de estas enfermedades en el sector salud
- Destinar una parte sustancial de la recaudación de impuestos al gasto en salud
- Incentivar a la industria alimenticia a fin de que reformule sus productos para hacerlos más saludables
- Crear un Observatorio Nacional de la Obesidad y Diabetes a cargo de la Secretaría de Salud
- Impuestos a la comida chatarra
- Leyes que prohíben la venta de esos alimentos en escuelas
- Nuevas etiquetas sobre contenido calórico y nutrimental en los productos