La Secretaría de Salud (Ssa) del estado de Guerrero tiene el registro de por lo menos 16 Unidades Médicas cerradas como consecuencia de la actividad delictiva que se registra en la Tierra Caliente.
Carlos de la Peña Pintos, titular de la SSa-Guerrero, indicó que los argumentos por los que médicos y enfermeras dejan de atender los Centros de Salud a su cargo, son básicamente el temor a sufrir un atentado por parte de las organizaciones delictivas que operan en la zona, aunque algunos ya han padecido actos de secuestro y de extorsión.
Los puntos en los que no van los médicos de manera regular, se atienden con Jornadas Asistenciales, por medio de un módulo especial que se ubica en la localidad de Lagunillas, en la parte que colinda con la Costa Grande.
En dicha zona, dijo que los trabajadores se apoyan en el resguardo que ofrecen operativos de la Policía del Estado y del Ejército Mexicano.
Cuestionado sobre el caso de San Miguel Totolapan, reconoció que es uno de los puntos que necesitan de mayor atención, pues junto al cierre de escuelas estuvo acompañado el de los centros de Salud, debido a la constante operación de la delincuencia.
El funcionario, confió que con base a los resultados que arrojen los operativos que implementan los tres niveles de gobierno en las zonas de mayor incidencia delictiva, poco a poco las actividades del sector Salud se normalicen, ya que ese es un reclamo de la población.
MMR
