Ignacio López Tarso y Juan Ignacio Aranda protagonizan la obra Una vida en el teatro, que estrena este viernes en el Teatro San Jerónimo Independencia; en conferencia de prensa, el primer actor reveló que subir al escenario solo con su hijo es un sueño que tenía desde hace años, además, sostuvo que seguirá trabajando mientras la vida se lo permita.
“Sí, sí he pensado en retirarme y lo desecho de inmediato, nunca me voy a retirar, me retirará la vida misma, llegará un momento en que ya no pueda más. No sé que vaya a ser en el futuro, pero no pienso retirarme nunca, aunque sé que un día voy a tener fin como actor y como persona, el tenor final tendrá que cerrarse alguna vez, pero no sé cuándo y no lo pienso”, dijo.
Y añadió: “Ahorita estoy muy contento porque el próximo viernes se va a cumplir un gran deseo que yo tenía desde hace muchos años, que era estar en una obra con mi hijo; cada vez que yo lo veo en el escenario me surge la idea y el deseo de estar juntos y de disfrutar en escena como disfruto el trabajo de muchos compañeros, se cumple ahora, porque nunca habíamos estado solos solos, que era lo que yo deseaba”.
Padre e hijo ya habían montado El villano en su rincón, de López de Vega, Drácula, Macario y El Quijote; pero ésta vez es especial, no sólo porque son los únicos en escena, sino también porque, en opinión del propio Juan Ignacio, Una vida en el teatro de David Mamet parece escrita para ellos dos.
“Parece que David escribió una obra para nosotros, me siento muy identificado. Nunca habrán visto una obra como ésta, porque por primera vez se meten a la intimidad de un camerino, nadie sabe qué pasa en un camerino, es un ambiente muy hermoso y a veces tormentoso, pero es muy rico y aquí se ve esa riqueza con un actor con experiencia y otro apasionado que espera aprender. Es una lección de vida desde el teatro”, indicó.
El director Salvador Garcini consideró que la puesta en escena tiene una similitud con la vida, porque todos hacemos un poco de teatro y el teatro es vivir; así, tratarán de mostrar las diferentes etapas de la vida a través de la historia de los diferentes géneros teatrales y las diferentes acciones dramáticas.
“Es una obra profunda porque da lecciones, nos enseña una ética y un amor. Lo más hermoso de la obra es que (López Tarso) la hace con su hijo, así se vuelve entrañable la obra, crean una química muy atractiva y una emoción muy grande”, mencionó.
Una vida en el teatro de David Mamet narra el encuentro del actor consagrado Roberto (López Tarso) y el aprendiz Juan (Aranda), quienenes entre funciones y camerinos comparten frustraciones, sueños y emociones personales. Ambos actores interpretarán diversos personajes, pues dentro de la puesta en escena se montan partes de icónicas piezas como Hamlet de William Shakespeare y La vida es sueño de Pedro Calderón de la Barca.
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