Mauricio Sulaimán rechazó que tenga intenciones de suceder a su padre, José Sulaimán, al frente del Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y afirmó que el organismo tiene directivos capaces de presidirlo. "No, definitivamente, no".
"El CMB es un organismo con una estructura muy fuerte, hay gente de muchos países muy entregada al boxeo, siempre fue un grupo muy sólido y creo que va a ser un organismo que va a durar por siempre", apuntó.
Mauricio aseguró que para elegir al nuevo titular de la entidad, que su padre dirigió los últimos 38 años, hay reglas claras.
Añadió que sólo piensa "en honrar a su padre y celebrar su vida llena de satisfacciones, de logros y de las cosas por aprender que nos ha dejado".
El hijo de Sulaimán comentó que la única motivación que ha tenido como secretario ejecutivo del CMB era estar junto a su padre, "disfrutar y aprenderle".
Mauricio dijo que lo único que desea es que el Consejo Mundial continúe la línea de trabajo de su padre, quien tuvo como meta dignificar al boxeo, con base en la justicia.
"Estoy seguro que será una etapa diferente, ojalá que sea mejor", puntualizó.