Tigres y Pachuca, Final de la Concachampions, juego de ida. El partido se mantenía 1-1 cuando, al minuto 66, el árbitro decretó un penal a favor de los Universitarios.
Eduardo Vargas era el encargado de cobrar la pena máxima y de darle una ligera ventaja a los felinos para el partido de vuelta. El grito de gol se ahogo en el estadio, el penalti fue errado por el chileno, la razón: ¡No hacerle caso al elemento de seguridad del estadio!
La curiosa imagen, en donde el sujeto le indicaba a Eduardo Vargas que debía disparar al costado izquierdo del guardameta, ya circula en redes sociales en una estampa que, sin duda, hubiera cambiado el rumbo de la Final.
El juego de vuelta se disputará el próximo 26 de abril en el Estadio Hidalgo; partido que definirá al representante de la Concacaf en el Mundial de Clubes que se realizará en los Emiratos Árabes Unidos en el mes de diciembre.
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