Como parte de la Jornada Penitencial a nivel nacional, la imagen del Señor de la Expiración salió del Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe para llegar a la Catedral de Monterrey, donde se celebró misa por el Viernes de Dolores.
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La imagen, con más de 300 años de historia, fue trasladada por las principales calles de Guadalupe sobre una camioneta al descubierto, hasta llegar al centro de Monterrey cerca de las 17:00.
El Señor de la Expiración fue recibido por el Arzobispo de Monterrey monseñor Rogelio Cabrera López, quien le solicitó su bendición para los regiomontanos cuando hoy se vive la contingencia por el virus Covid-19.
“Por más de tres siglos y medio ha sido la señal de esperanza de nuestro pueblo (...) en esta pandemia, la Iglesia de Monterrey se une a las voces del mundo que le piden a Cristo clemencia”, expresó monseñor Rogelio Cabrera.
Al Señor de la Expiración de Guadalupe se le pedía por lluvias en tiempos de sequía, principalmente durante todo el siglo XIX, según las referencias en el Archivo Histórico de Monterrey.
Todavía hasta las primeras décadas de 1900 era común que la imagen saliera de su templo en Guadalupe para pedir por las lluvias. Su celebración está marcada para cada 9 de agosto.
La misa se celebró sin feligreses respetando las medidas sanitarias ante la crisis desatada por el coronavirus. Sin embargo, fue seguida por el Facebook de la Arquidiócesis de Monterrey, contando con 238 mil reproducciones.
