Con una propuesta de poética en torno a la violencia e inseguridad que se vivió en la Comarca Lagunera a partir del año 2007 y que bajó en incidencias hasta 2014, el escritor peruano Miguel Amaranto prepara la edición de su libro titulado 'Cenizas', el cual será presentado por Julio César Félix Lerma.
“Cenizas es un libro que contiene haikus, que es una forma literaria poética de origen japonés y este librito ya había se había presentado antes como un tríptico, pero en esta ocasión me he animado a hacerlo en forma de libro como un homenaje al haiku”.
Para ello lo dividió en tres partes, pues esta forma literaria está compuesta por tres versos de cinco, siete y cinco sílabas respectivamente.
“El libro está distribuido en tres partes también, que la primera tiene cinco haikus, el segundo tiene siete y el tercero tiene cinco, pero para este libro le he agregado tres más con otro título que viene en la parte final".
“Digamos que con los diecisiete haikus termina el libro, que hace referencia a lo que fue la violencia en su apogeo aquí en La Laguna y los últimos tres que se han agregado forman una parte nostálgica en torno a la libertad y en referencia a esos diecisiete que tiene este tema”, explicó.
Miguel Amaranto dijo que con esta publicación se hace una invitación a los lectores para sentir lo que fue la Comarca Lagunera como escenario de violencia.
“Se puede hacer poética en torno a lo que quieras, finalmente la creación literaria no tiene límites y así como puedes escribir un poema a un platillo, puedes hacer un poema al amor y a todo lo que ocurre como entorno social sin hacer propiamente apología, sino que es el sentir la referencia inmediata de lo que pasa”.
Detalló que el escritor mantiene una obligación intrínseca de decir lo que ocurre en determinados momentos, sin mencionar fechas específicas, colocando los hechos como parte de la vida cotidiana.
“Finalmente la creación poética refleja la cotidianeidad vista con otros ojos”, dijo el escritor, quien sabe que el formato elegido para Cenizas explora la brevedad con miras a alcanzar la contundencia.
“En tres líneas tienes que decir todo lo que debes, además de que tienes que contar tus sílabas, lo que dices debe ser preciso sin ser explicativo, que el lector no se quede con las ganas o insatisfecho, con independencia de lo que construya tu mente”.