Estudios internacionales reportan que los programas para detección de cáncer de mama que tienen como pilar la mastografía resultan insuficientes para reducir la mortalidad, por lo que es necesario fortalecerlos con nuevas estrategias, aseguró Guillermo Ruiz Palacios y Santos, titular de la Comisión Coordinadora de Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad.
"A escala mundial se han creado programas de detección temprana teniendo como pilar la mastografía. Después de 10 años de emplearlos en Estados Unidos y Europa publicaron evaluaciones sobre su impacto en mortalidad, y lo que se ha visto es que ese estudio, como pilar de la detección temprana, no ha disminuido los fallecimientos", aseguró.
De acuerdo con el funcionario federal, las evaluaciones publicadas en The New England Journal of Medicine establecen que lo que ha disminuido la mortalidad de esa neoplasia son los tratamientos otorgados a las pacientes que ya cursan con la enfermedad.
"Esto nos obliga a cuestionar cómo vamos a establecer los programas de prevención para disminuir los decesos", aseguró Ruiz, tras referir que ya hay nuevas tecnologías capaces de detectar marcadores tumorales y estudios genéticos para hacer diagnósticos tempranos.
ADELANTARSE A LOS TUMORES
En entrevista con MILENIO, Ruiz acotó que no se trata de eliminar la mastografía de los programas, sino de implementar estrategias paralelas e integrales que involucren, por ejemplo, la secuenciación de ADN y estudios específicos de biomarcadores para localizar células malignas, aún sin expresarse.
Tras la inauguración de la segunda Reunión del Colegio Mexicano para la Investigación del Cáncer, Ruiz consideró que el trabajo colegiado que realiza el Instituto Nacional de Cancerología (Incan) con la Universidad Autónoma de México (UNAM), el Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav) y otros institutos, será esencial para que el Comité Nacional de Salud replantee las políticas públicas sanitarias.
El funcionario aseguró que con la apertura de la Unidad de Investigación Biomética en Cáncer, a cargo de Luis Alonso Herrera y que tuvo una inversión de 200 millones de pesos, será posible efectuar ese replanteamiento de los programas dedicados a la detección oportuna.
En la inauguración, celebrada en el contexto del 69 aniversario del Incan, Ruiz reiteró que el problema no es la mamografía, pues ha sido una herramienta útil y se mantendrá dentro de los programas; sin embargo, aunque hay alrededor de mil 200 aparatos en el país, se carece del personal adecuado para efectuar las interpretaciones certeras.
"Tenemos suficientes mastógrafos; si se usaran de manera eficiente y se contara con el personal capacitado, tendríamos mejores registros. Pero muchos son manejados por no expertos y dan como diagnóstico falsos positivos", señaló Ruiz.
"No sabemos cuántos errores se comenten al respecto ni hemos hecho estudios, porque los programas de prevención en el país tienen poco tiempo", aclaró.
Además de los falsos positivos, agregó, también hay tumores muy malignos y este tipo de pacientes son resistentes a las terapias convencionales, por lo que aunque se detecten a tiempo, no hay posibilidad de cura.
UNIDAD PREVENTIVA
Ante ese panorama, la Unidad de Investigación Biomética contará con alrededor de 50 investigadores que efectuaran diversos ensayos clínicos y con la cámara de electroforesis podrán secuenciar y detectar genes marcadores tumorales, sus variantes y polimorfismos en el ADN, explicó Herrera.
En el edificio, que iniciará con los trabajos de manera formal en enero de 2016, participarán la red de investigación del Colegio Mexicano para la Investigación del Cáncer, conformada por expertos y estudiantes.
"Estamos consolidando la mayor base de datos, con distintas líneas celulares de todos los tipos de cáncer posibles para hacer investigaciones a gran escala, y la red de institutos facilitará realizar los análisis de todo el genoma para llegar a diagnósticos personalizados", puntualizó el estudiante de doctorado de la UNAM Víctor del Castillo.
El edificio cuenta con un área de microscopía avanzada donde se instaló un aparato que obtiene imágenes tridimensionales, esenciales para identificar e inspeccionar receptores, biomarcadores, semiconductores de las células malignas a fin de resolver qué tipo de genes y cromosomas están involucrados en el proceso cancerígeno.
"En las leucemias, por ejemplo, hay cromosomas muy particulares como el Filadelfia, que es una anormalidad genética asociada a la enfermedad; la idea es identificar cómo opera", aclaró Del Castillo después del acto protocolario al que asistieron autoridades de la UNAM y el director ejecutivo del Patronato del Incan, Alfredo Cantú.
Claves
Estadísticas
- En México el cáncer de mama ha aumentado, tiene una tasa de mortalidad de 10.9 por ciento y provoca alrededor de 5 mil 405 defunciones al año.
- Desde 2012 se han realizado 6 millones de mastografías ampliando la cobertura de 49 a 88 por ciento.
- El Seguro Popular ha cubierto más de 26 mil pacientes con más de 5 mil millones de pesos, logrando una supervivencia de 70 por ciento.