En un proyecto de arte público copatrocinado por el Fondo para la Producción Artística y la marca de cosméticos Kiehl, este 12 de mayo el artista estadunidense de 62 años volvió a uno de los sitios icónicos de Manhattan, el Rockefeller Center, con la pieza Bailarina sentada, apenas su segunda obra inflable de arte público. La pieza se expondrá del 12 de mayo al 2 de junio.
Koons regresa a uno de sus temas permanentes, el de la bailarina, en este caso la figura sentada se ajusta con elegancia una zapatilla de ballet. La imagen está basada en una pequeña escultura de porcelana, una antigüedad de principios de siglo procedente de Rusia.
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“La Bailarina sentada es como una Venus, es como mirar la Venus de Willendorf o cualquier otra de las Venus clásicas”, comentó Koons, “es una pieza sobre la belleza que busca recobrar el sentido del placer de la contemplación”.
En el mismo Rockefeller Center y con el patrocinio del Fondo para el Arte Público, Koons a presentado otras dos piezas con anterioridad, la llamada Puppy (2000) y Split Rocket (2014), ambas obras esculturas de gran escala, dispuestas con decenas de miles de flores multicolores.
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Este mes en nueva york se celebra el mes de la niñez, por lo cual Koons, patrocinado por la marca de cosméticos Kiehl, elaborará una edición limitada con una serie de réplicas en miniatura de la Bailarina sentada, cuya venta será destinada al Centro Internacional de Niños perdidos o Explotados.
*Con información de Reuters
AG