El director, escritor y actor de teatro, Ángel Hernández, fue becado por un organismo internacional para realizar un proyecto en Afganistán sobre las “hijas del opio”, mujeres que son entregadas como garantías de cultivos de la droga.
El dramaturgo tampiqueño explicó que la visita al país de medio oriente será el próximo mes de febrero y constará de más de 30 días de investigación con familias víctimas de este ‘modus vivendi’ forzado por grupos criminales.
“Estaré con familias que han padecido este fenómeno común en la zona rural de Afganistán, siento que será muy duro poder vivir y relatar ello” expresó.
Las ‘hijas del opio’ son las mujeres jóvenes o niñas que son entregadas por deudas adquiridas por sus familias para los cultivos de droga, recuperados por bandas del crimen organizado o terroristas.
El proyecto fue entregado a, y financiado por Iberescena, que también apoyó otros dos proyectos de investigación y creación de guiones: el primero en Vietnam sobre los hijos de los soldados norteamericanos y los vietnamitas durante la guerra, realizado en 2013; y el segundo una residencia en Argentina, Chile y Uruguay en espacios de la desaparición durante las dictaduras.
Iberescena, con sede en Madrid España, se sirve de fondo de 15 países aportación para financiar proyectos de investigación y creación de guiones de teatro.
Ángel Hernández, director del grupo “Teatro del fin del mundo” se especializa en el rescate de espacios abandonados para acondicionarlos como áreas de proyección, planeación y escenificación
Entre el pasado 25 y 30 de noviembre, un total de 12 compañías con más de 60 actores, guionistas, directores de teatro, ponentes y conferencistas de España, Chile Argentina, Uruguay, Colombia, así como México, estuvieron en Tampico para el Primer Festival Teatro del Fin del Mundo, que utilizó edificios históricos como los ex hospitales Carlos Canseco de Tampico y el Naturista, en Playa Miramar en Madero, así como otra media docena de inmuebles históricos, entre ellos una iglesia abandonada, además un hotel en el primer cuadro de la ciudad de Tampico, donde organizaron y crearon escenas.
Actualmente el grupo de teatro que preside ha tomado bajo convenios tres edificios del Centro de Tampico que estaban abandonados, La Guarda, Antígona y Prometeo.