Un mail con un recorte de periódico sobre personas desaparecidas y otras que habían sido asesinadas en Guerrero fue lo que motivó a Mariana a viajar a ese estado en busca de su padre, de quien no sabía nada y con quien no tenía mucho contacto.
Esa es la historia retratada en el documental Por los caminos del sur, dirigido y fotografiado por Jorge Luis Linares, y presentado en el Festival Dei Popoli que se realizó del 27 de noviembre al 4 de diciembre en Florencia, Italia y donde participó en la categoría de Mejor Cortometraje Documental.
La cinta es el primer documental que dirige Linares, quien en el proceso de rodaje no sólo descubrió su gusto por este género sino también el sacrificio que implica abrazar una causa y el tomar una decisión que puede generar una relación difícil entre un padre y su hija.
La montaña es el centro de encuentro entre Miguel Ángel Mijangos, activista que preside la asociación Procesos Integrales para la Autogestión de los Pueblos (PIAP) y que se centra en la defensa de la tierra de las acciones mineras, y Mariana, su hija, quien estudia danza en la Ciudad de México.
La cámara muestra el choque entre la montaña y la ciudad, entre dos perspectivas distintas de ver el mundo y cómo poco a poco la barrera que separa al padre de su hija se rompe. Mariana es capaz de entender el trabajo de su padre, su estilo de vida, de conocerlo un poco.
"Es muy duro, es el primer ejercicio serio y en forma de documental que hacemos y de pronto es inevitable llorar, estás abrumado por lo que está pasando", dice Linares, director del documental.
Para él, el documental implicó invadir, hasta cierto punto, la privacidad de Mariana, grabar su momento de autodescubrimiento, el encuentro con su padre. "Ella se llevó la parte más fuerte, pero nosotros estábamos ahí junto a ella", dice.
El impacto del documental llevó a Linares a preguntarse: "qué cosas estoy dispuesto a sacrificar por las decisiones que he tomado y estoy por tomar", pues fue el trabajo de Miguel y los estudios de Mariana lo que provocaron su distanciamiento.
El director cuenta que no hay una manera fácil de sobrellevar el rodaje mientras ves las dificultades que viven los personajes, pues te afecta de alguna forma. Lo que lo hace más tolerable es el apoyo de tus compañeros de filmación.
Lo más complicado fue "sobrevivir cuatro días" en la sierra de Guerrero, con comida racionada y cargando el equipo de grabación o transportándolo por carreteras desgajadas, dice Linares.
Las dificultades de acceso, el caminar por horas por un camino de tierra, el encontrarse con la marginación del lugar es por lo que Linares dice que la cinta fue una forma de entender la situación en la sierra de Guerrero.
Para Linares el cine se convierte en una suerte de crecimiento personal. "A veces se apaga la luz y dos horas después te encuentras distinto, enfrentando cosas personales muy fuertes, lleno de curiosidad".
Desde muy joven se dio cuenta de que el cine puede generar un impacto en la vida de las personas. Él dice, que en su caso, fueron cuatro o cinco películas "las que determinaron mi personalidad, mi manera de ser", tal es el caso de Atrapados sin salida de Milos Forman, Jurassic Park, que le metió en la cabeza el querer estudiar paleontología, Corazón Valiente y Adam y Mary de Adam Elliot.
Linares llega al cine hace cinco años. Decidió estudiar cinefotografía porque los directores que le gustaban "eran muy inteligentes y habían tenido vidas bastante interesantes", mientras que él sentía que su vida no era lo suficientemente interesante para ser un director.
Por los caminos del sur fue el resultado del taller de documental que coordina Luciana Kaplan en el Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC), un curso que empieza en el cuarto año de la carrera en dicho centro y cuyo director jamás esperó que ganara el premio José Rovirosa al Mejor Documental Estudiantil 2015.
La cinta se estrenó en el Festival Internacional de Cine de Morelia en octubre de 2015 y participó en el 56° Festival Dei Popoli en la categoría de Mejor Cortometraje Documental; aunque la película no ganó en dicho festival, Linares quiere que se siga exhibiendo en festivales internacionales.