A pesar del intenso calor que se dejó sentir la tarde del domingo, miles de regiomontanos acudieron a la Macroplaza y sus alrededores, tratando de disfrutar de las atracciones de la ciudad sin amedrentarse por el sol.
El Paseo Santa Lucía fue el lugar donde más personas se observador, debido en parte, a que existen muchas partes donde los visitantes se pueden guarecer en espacios con sombra, además de que hay fuentes dónde mojarse.
“Pues mira, los niños ahí andan mojándose, agarran esos charcos como albercas... teníamos pensado no salir por el calorón, pero mejor nos vinimos para acá”, dijo la señora Karla, habitante de Guadalupe que llevó a sus dos hijos a pasear.
Otra de las opciones que tomaron los paseantes fue la de entrar a los museos, el de Historia Mexicana y el Museo del Noreste (Mune), los cuales en domingo tienen entrada gratuita y que son perfectos por su climatización, como es el caso de Carlos Acosta y su familia.
“Nosotros veníamos a lo de los deportes allá en la Macro, pero mejor nos vinimos al Museo de Historia, sirve que los niños aprenden algo”, explicó Carlos Acosta.
Los que más se vieron beneficiados por la temperatura que registró el municipio de Monterrey, que en algún momento de la tarde alcanzó los 36 grados centígrados, fueron los vendedores de aguas y demás bebidas refrescantes.
“Ahorita hacemos nuestro agosto, la gente compra lo que sea para quitar la sed”, dijo un vendedor de aguas frescas.
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