A sus ocho años, Mariana Valdez Carrillo estudia en el Colegio Nueva Laguna, donde también practica futbol y juega con la pelota durante el recreo. A pesar de no compartir su gusto con sus amigas en la escuela, a Mariana no le afecta en lo absoluto integrarse a un equipo entero de hombres para perseverar y alcanzar su meta de ser futbolista profesional.
En casa Mariana es una total aficionada al deporte del futbol, gusto que comparte y adquirió de sus padres pero con una ligera diferencia de que su padre apoya a los Rayados de Monterrey, su madre al América y Mariana al Santos Laguna. A pesar del “relajo” que se vive en casa, cuando se trata de Mariana, todos son fans del equipo lagunero.
A medida que crecía su gusto por el futbol, Mariana nunca le tuvo miedo a integrarse a jugar con los varones, se ganó el respeto de sus compañeros y, con sus ganas reflejadas en la cancha, se defiende ante cualquier obstáculo. Por ello, hoy Mariana participa en la Copa Santos Peñoles 2019, destacando como la única mujer en su equipo, antes de considerar un equipo femenil.
Si algún compañero te dice algo por querer jugar futbol ¿Qué respondes?
Una vez en el kínder un niño me dijo que no podía jugar con ellos.
¿Y qué le contestaste?
Le pregunté que por qué no podía.
¿Te dejaron jugar después de eso?
Sí. No pasó nada y no nos peleamos.
Entre risas tímidas, Mariana comenta que en su casa la apoyan para seguir entrenando futbol y que su gusto comenzó a temprana edad.
¿Cómo iniciaste en el futbol?
Cuando era pequeña, jugaba con un vecino al fut y de ahí me gustó mucho.
¿Desde cuándo lo practicas?
Desde los cuatro años.
¿Qué posición juegas?
Media.
¿Y qué quieres ser cuando seas grande?
Futbolista.
¿Con qué equipo te gustaría jugar cuando seas mayor?
Con el Santos Laguna.
¿Quién es tu jugador favorito del Santos?
Julio César Furch.
Mariana es una niña sonriente y tímida a la vez pero cuando entra a la cancha de juego se transforma. Su madre comenta que su progreso ha sido impresionante, que cuando las personas conocen a Mariana es como cualquier otra niña pero al verla con un balón – situación que ocurre con frecuencia en casa- es una chica valiente, sin miedo a nada.
“Nos sorprende como juega al “tú por tú” con los niños, no les tiene miedo, le pega fuertísimo al balón”, comenta Karla Castillo, mamá de Mariana.
Mariana no siempre fue una niña “amiga del balón”, solía usar zapatillas y listones para practicar ballet, pero cuando inició en el mundo deportivo ninguna otra disciplina le llenó tanto como ahora lo hace el futbol. Ante esto, dice estar emocionada de vivir su primera participación en una Copa Internacional de futbol como jugadora de su equipo en la categoría infantil 2011.
Su padre, quien fue bendecido con dos hijas, comenta que el ver a Mariana jugar en la cancha entre tantos niños, lo llena de orgullo. Enfatiza que en casa hay disciplina y los valores exactos para crecer con la idea de alcanzar lo que se desea, a pesar de cualquier adversidad.
“Admiro mucho a mi hija, tiene mucha capacidad. Estoy orgulloso de ella porque si es complicado a veces participar con niños que incluso toman mucho en cuenta el nivel de competencia contra Mariana pero a mí me encanta verla jugar” comenta Juan Alberto Valdez, papá de Mariana.
Su hermana mayor, Icela, a sus catorce años practica natación y aunque no es lo mismo al futbol, su pasión por el deporte hace que su relación entre hermanas sea empático y lleno de apoyo. “Yo le digo que sea constante, que no se deje llevar por lo que digan los demás” comenta Icela.
Finalmente Mariana responde ante la pregunta…
¿Y qué le dirías a las pequeñas que como tu quieren jugar futbol?
Que le echen ganas y practiquen mucho (risas).
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